A solo unos minutos de la Bahía de Acapulco, Pie de la Cuesta se presenta como un paraíso oculto que combina naturaleza exuberante, playas casi vírgenes y una atmósfera de paz. Esta franja costera, situada al poniente del puerto, cautiva con sus atardeceres de ensueño y el contraste único entre el Océano Pacífico y la Laguna de Coyuca.
Un refugio para desconectarse
Lejos del bullicio turístico, Pie de la Cuesta invita a vivir experiencias auténticas. Desde una caminata descalzo sobre arena tibia, un paseo en lancha para explorar las islas de la Laguna de Coyuca —La Montosa y Isla de los Pájaros—, hasta relajarse en hamacas con una bebida fresca antes de contemplar el cielo teñido de naranja, púrpura y rojo al caer la tarde.

Aventura y deportes acuáticos
Este destino es perfecto para quienes aman la adrenalina. La laguna es ideal para practicar ski acuático, wakeboard, kayaking o paddle boarding, mientras que en el mar se disfruta del bodyboarding. Para familias con niños, Isla Park, un parque acuático inflable, añade diversión garantizada.

Gastronomía con sabor a mar
Las enramadas frente al mar ofrecen pescados y mariscos frescos preparados al momento. Destacan el pescado a la talla, ceviches, camarones al ajillo y el famoso caldo “rompecatres”, un platillo tradicional de cuatete con fama afrodisíaca. Todo acompañado de cocos recién cortados y hospitalidad guerrerense.
Hospedaje para todos los gustos
Pie de la Cuesta cuenta con opciones que van desde bungalows ecológicos junto a la laguna hasta hoteles boutique con vista al mar. Un destino ideal para parejas, familias y viajeros solitarios que buscan tranquilidad.
Pie de la Cuesta no es solo un lugar: es un estado de ánimo. Un rincón donde el tiempo se detiene, la naturaleza protagoniza cada momento y el alma encuentra calma. Visítalo y #DePieDeLaCuestaEnamórate.
