En el corazón de Coyoacán, entre calles arboladas y ese ambiente bohemio que enamora, hay un lugar que guarda el espíritu de Yucatán en cada plato: Tucán. Con 37 años de historia, este restaurante no solo es un referente gastronómico, sino también un punto de encuentro para quienes buscan sabores auténticos, cerveza artesanal y un ambiente festivo que te hace sentir como en casa.
Desde su fundación, Tucán ha apostado por una propuesta honesta y cercana, cocinando con ingredientes típicos, sazón casera y respetando las recetas originales. Su menú es un recorrido por los sabores del sureste: cochinita pibil, salbutes, panuchos, montaditos de plátano macho y un sorprendente caldo de camarón negro. También hay opciones creativas como los chilaquiles yucatecos o una pizza de cochinita que fusiona lo tradicional con lo contemporáneo.
En nuestra visita, decidimos probar la sopa de lima, aromática y reconfortante, con un equilibrio perfecto entre el toque cítrico y el sabor profundo del caldo. Luego llegó la estrella de la casa: la cochinita pibil, con su carne jugosa y bien marinada en achiote, acompañada de cebolla morada encurtida que le da ese contraste ideal. Para cerrar con broche de oro, pedimos un cheesecake de frutos rojos con mermelada hecha en casa: cremoso, fresco y con un dulzor natural que conquistó a todos en la mesa.
Las bebidas merecen su propio capítulo. Probamos el agua fresca de chaya, refrescante y ligeramente herbal, perfecta para acompañar cualquier platillo. También la cerveza artesanal Tucán, que marida a la perfección con la comida yucateca y que puedes pedir en degustación para descubrir sus diferentes estilos.
El lugar no solo brilla por su cocina. La experiencia se completa con música en vivo: acústicos los viernes y sábados, y marimba los domingos. Además, Tucán organiza catas, degustaciones temáticas y destapes especiales de cervezas artesanales, lo que lo convierte en un espacio donde siempre hay algo nuevo que probar.
Si buscas una experiencia completa, que combine gastronomía, tradición y un ambiente alegre, Tucán es una parada obligada en Coyoacán. Es de esos lugares que no solo visitas para comer, sino para celebrar la vida, compartir con amigos y reconectar con los sabores del sur. Y si quieres conocer la verdadera cocina yucateca en la Ciudad de México, no puedes dejar de probar la sopa de lima, la cochinita y su cheesecake de frutos rojos: auténticos imperdibles.
Montserrat Rosas Ugalde